Tuesday 13 December 2016

Storytelling: ¿Puedes verla?

Autor: Carlos Daniel López Pérez
Si quieres ser escritor, hay dos cosas que debes
hacer por sobre todo lo demás:
leer mucho y escribir mucho.
No conozco ninguna manera de saltárselas,
ningún atajo.
-Stephen King
Siempre he sido bueno escribiendo, se me da con facilidad, la redacción es fluida y la ortografía y la puntuación más o menos, pero siempre logro terminar correctamente si empiezo con tiempo. El único problema es saber qué escribir, buscar un tema, siempre tardo horas en eso. Esto es muy común, muy constante, y cada que tengo algún trabajo escolar que incluye redacción (lo cual es muy seguido), me toma varios días y horas poder terminar la tarea y poder imprimirla o mandarla por correo.
Una nueva actividad en la Universidad pretende poner a prueba mis habilidades como escritor. “Storytelling” es su nombre y tiene el objetivo de acostumbrar a los estudiantes a un modo diferente de escritura a la que usualmente se pide en la carrera que estudio. Esta actividad me gustó, así podía explotar mi imaginación por completo; pero, como siempre, no sabía qué escribir.
Para solucionar este tipo de problemas, la profesora nos recomendó, antes de escribir y “en lugar de estar sentado frente a la pantalla de Word, mirando el cursor” (en lo personal, esa es la técnica que uso), que plasmáramos todo lo que estuviera en nuestra mente en físico para así poder tener una idea de qué escribir. Podíamos usar figuras de Lego® o plastilina para construir las ideas, también podíamos dibujar o escribir cosas al azar, ya sea en una hoja en blanco o en post-its, el punto era “darle cuerpo a nuestras ideas”.
Era una tarea sencilla. Ninguno de los métodos que nos sugirió la profesora me servían, sabía qué quería escribir una historia de terror, pues era el tipo de relato que fácilmente cumplía con las particularidades que la profesora pedía: una normalidad, un problema, una solución al problema y una nueva normalidad. El problema era qué tema era el que mi relato trataría, qué tema paranormal o terrorífico usaría.
Entonces, intenté otro método: buscar en Internet pequeños relatos o vídeos de narraciones en YouTube. En mi búsqueda llegué a una muy interesante, y supuestamente basada en una historia real, en un blog de “creepypastas”, su nombre era “La Merodeadora”; la trama era muy sencilla: el espectro de una mujer que, tras ver una imagen o fotografía de ella, comienza a acosarte, tanto de día como de noche, dormido o despierto, hasta que  provoca quitarte la vida y firma con “Ahora ella te ve, ¿puedes verla?”. Supuestamente, según decía el blog, aquel que leyera el relato o viera la imagen real de “la merodeadora”, sufriría lo mismo que aquellas personas.
Ahí estaba, ya tenía mi inspiración, podía escribir una historia relacionada con este personaje, incluso podría usar el mismo “personaje paranormal”. Empecé a escribirla con tres semanas de anticipación a la fecha de entrega, lo hacía todos los días, después de clases en mi casa e incluso en la noche, antes de acostarme a dormir como a las 2 a.m., cumpliendo con un total de 3 o 4 horas para ese relato, más de lo que ocupé para cualquier trabajo escolar.
Mi relato era muy similar al que había leído, lo que lo diferenciaba era “el espectro”: modifiqué sus características, tanto físicas como los efectos que provocaba en sus víctimas, pero el trasfondo era muy similar.
Tras 5 o 6 días de estar escribiendo constantemente, comencé a notar a un extraño personaje, como una niña, a lo lejos, que parecía estarme siguiendo. Y conforme fui avanzando en el relato e iba dotando de más características a mis personajes, notaba que “ella” se acercaba más y más a mí; ella no caminaba, de eso estaba seguro, sólo se aparecía en cualquier lugar donde yo dirigiera la mirada, ahí fue cuando comencé a extrañarme.
Su presencia comenzaba a ponerme incómodo, me sentía acosado. El verla en todos los lugares en donde yo estaba. No quería decirle a mis amigos ni a mis conocidos qué sucedía, para evitar que creyeran que estaba loco y se mofaran de mí; sin embargo, mi cambio de humor al verla era inevitable, me tornaba serio y mantenía mi vista fija en ella, hasta que mis amigos lo notaban y llamaban de nuevo mi atención.
Cuando logré terminar la historia, todo se salió de control. “Ella” comenzó a aparecerse más cerca; estaba tan cerca que su presencia imponía tanto en mí, que quedaba paralizado, con una expresión de horror. Ahora, ella se paraba frente a mí si me quedaba quieto o a caminar tras de mí si iba por la calle. Sabía algo con certeza: era exactamente igual a la que yo había descrito en mi relato.
La incomodidad rápidamente se transformó en paranoia y miedo. No me dejaba solo en ningún momento, ni en mi casa ni en la escuela ni en la calle; incluso en mis sueños aparecía: en ocasiones solamente se quedaba parada repitiendo “¿Puedes verme?, yo puedo verte” o, a veces, corría en mi dirección, intentando alcanzarme, si eso pasaba, al día siguiente aparecía más cerca de mí.
Inmediatamente comenzó a notarse en mi estado de ánimo y en mis expresiones diarias: todo el día me la pasaba paralizado, pues su presencia no me dejaba moverme; al caminar no dejaba de voltear atrás esperando que ella ya no me siguiera. Pero en el momento en que la veía, mi respiración se aceleraba o un grito salía de mi boca, era inevitable. Mis expresiones de miedo y preocupación eran muy notorias.
Mis amigos y todos aquellos cercanos a mí, comenzaron a creerme loco y a distanciarse, dejándome solo, con eso que me acosaba. Ellos no la podían ver, nadie podía, sólo yo y estaba volviéndome loco.
La semana está por terminar y ya no la soporto. Estoy solo, nadie quiere ayudarme en esto y los que creen poder ayudarme, me llevan con psicólogos y eso no ayuda. Llevo toda la semana sin poder dormir bien, porque cada que aparece en mis sueños, me despierto y me aterra volver a dormir. Ya estoy cansado de que ella me persiga, a mí, que la creé, que le di vida.
Ésta no es una historia de terror, esto es real, ella está por alcanzarme. Si llegan a leer esto, sepan que éstas son mis últimas palabras y los motivos por los cuales… hice lo que hice. Por fin, ya no podrá hacerme daño.
Si leíste por completo esto, déjame decirte que ahora ella te ve a ti, ¿puedes verla?

La Loteria 

Julián salía de su casa como todas la mañanas al puesto de periódicos más cercano, esto lo hacia porque una vez al mes compraba un billete de lotería con la esperanza de ganarse el premio mayor y dejar de trabajar en esa horrible oficina, trabaja en recursos humanos, nunca le había gustado su carrera, sin embargo tenia que trabajar porque de aire no se vive. Cuando llego al puesto de periódicos con la esperanza de que su boleto saliera premiado, reviso cuidadosamente la hoja con los numeras ganadores, vio que el primer dígito coincidía, luego reviso el segundo y el tercero los cuales también coincidían, al llegar al cuarto y quinto número, sus manos temblaban, no podía creer lo que pasaba, los 5 dígitos coincidían, se había ganado el premio mayor, solo un grito de emoción, estaba riéndose, no lo podía creer, al fin su vida cambiaría para siempre. 
Cuando levanto sus manos para festejar, el billete que traía en las manos salió volando por el fuerte viento de esa mañana. Inmediatamente, angustiado fue a perseguir el billete, no podía dejar que su oportunidad de cambiar su vida se le escapará, lo persiguió hasta un parque, el billete había caído cerca de una banca, Julián lo alcanzó a ver de lejos, cuando se iba acercar a recogerlo una chica que iba pasando se tuvo y levantar el billete. Julián corrió para detenerla, se detuvo y le dijo: -¡Disculpa ese billete es mío!, lo he estado buscando. La chica inmediatamente sonrió. -¿Cómo puedo saber que es tuyo y no me estas engañando?, este billete podría ser de alguien más e incluso estar premiado. Julian preocupado le respondió: -Mira ese boleto lo compré yo y hoy en la mañana salí a ver si estaba premiado pero lo traía en la mano y por el fuerte viento salió volando. La chica no estaba convencida, examinó el boleto y luego a Julián, dijo: -No sé, suena creíble tu historia pero que tal si este billete es el ganador, habré dejado pasar una gran oportunidad. Julián, estaba cada vez más desesperado, no quería perder su billete ganador. - Por favor, mira te propongo algo dame el billete y voy a revisar si gané algo, y si si voy a regresar aquí donde estas -dijo Julián. La chica no lucia convencida. -Y como se que si vas a regresar, que tal que ya no regresas, mejor voy contigo. Julián no estaba seguro de querer compartir su premio, pero tampoco quería perderlo, así que acepto. Caminaron hasta el puesto de periódicos más cercano, cuando llegaron la hoja de ganadores ya no era la misma, la hoja que había visto hoy en la mañana resulto ser de dos días antes, el vendedor no se dio cuenta y no lo había cambiado. Julián sentía como todo se le venia abajo. La chica al notar la expresión de Julián le dijo: -¿Qué tienes parece como si se te hubiera muerto alguien?. Julián no dijo solo cerro los ojos. la chica le dijo: -Mira no es el fin del mundo, porque no te invitó algo, no cualquiera acepta que una desconocida lo acompañe a ver los resultado de su billete de lotería. Julián asintió, ya no tenia nada que perder. 

Carecía de forma.

Carecía de forma

Un pato carecía de forma, desde el inicio careció de forma. El pato sabía que esa era su forma, yo también lo sabía; no sé cómo ni porque, pero aún sin verle forma yo sabía que era un pato. Poco poco, al pasar del tiempo se seguía construyendo; el pato siente que está tomando forma, aunque se supondría ya está construido.

No me explico porque aún no le hallamos forma, si por fuera  sí parece que es un pato.
Traté de hallarle forma escribiendo la palabra “pato”, pero eso no funciono, la forma del pato no está en la palabra “pato”. Así que pensé ¿Qué hace a un pato ser un pato?, así que decidí dotar al pato de las cosas que hacen a un pato ser un pato. Un lago, un bosque…
Pero seguimos, él y yo sin hallar la forma.

Regresé al patito al lugar donde todo había comenzado, quizá aquí estaba la respuesta; pero regresar a este origen me provocaba ir desarmando poco a poco ir desarmando aquello que antes había tenido forma de pato.
Entre más pasaba el tempo para aquella figura, más perdía su forma, nunca fue un pato pero ahora ni siquiera lo parecía.


Una vez más traté de darle forma de pato, error tras error seguí intentándolo hasta que cuando creía nunca encontraría forma, descubrí que jamás podría hallar la forma de pato en eso, ya que sin querer, lo que encontré en esa figura era un cerdito. Siempre lo había sido.

Monday 12 December 2016

Siempre Tarde

Por: Brenda Ramos y Adriel Reyes.

Otra vez tarde. Detesto que me suceda, lo peor es tomar el transporte a esta hora, me preparo física y mentalmente para la batalla que me espera, es por eso que me sorprendo mucho al llegar a la parada del camión pues está totalmente despejada.
El camión llega a tiempo y cuando me subo, comienzo a pensar que la suerte parece estar de mi lado pues encuentro un lugar libre que tomo sin pensarlo dos veces. Ya sentada y con los audífonos listos para un concierto personal, saco mi libro de la mochila dispuesta a retomar la lectura, llevo unos cuantos minutos en eso cuando levanto la vista y todo lo que había leído desaparece de mi mente.
No es la primera vez que lo veo, pero siento como si fuera así y me tomo un momento para observarlo, y es así como me doy cuenta de que es lindo ¿Por qué no lo noté antes? De repente me doy cuenta de que lo estoy mirando intensamente y me reprendo mentalmente. Decido regresar a mi libro y lo hago, pero sin mucho éxito, llevo leyendo la misma línea varias veces.
No puedo evitarlo, mi mirada va automáticamente hacia él, que está de pie algunas filas de asientos por delante. Siento que llevo una eternidad mirándolo justo cuando él voltea su mirada hacia mí y me sonríe ¡me sonríe! Pero claro, como la boba que soy en lugar de sonreírle, solo bajo la mirada hacia mi libro, el cual sigo sin poder leer, pero finjo que lo hago y que es muy interesante.
Un rato después me atrevo a mirarle nuevamente y él me vuelve a mirar y esta vez, me armo de valor y le sonrío y cuando me doy cuenta, hacemos eso de mirarnos a cada rato.
Falta poco para bajarme y por primera vez en mi vida no quiero hacerlo, regreso la mirada hacia donde el está y no lo veo, muchas personas bajan aquí, así que muchos se han levantado de sus lugares para bajar y sigo sin poder ubicarlo entre las personas, por lo tanto me resigno y me preparo para bajar.
Cuando es mi turno para bajar veo una mano extendida hacia mí y miro al dueño de la mano, es él y sin pensarlo mucho, tomo su mano para que me ayude a descender. De nuevo está sonriendo y no suelta mi mano, de verdad espero que tenga el mismo rumbo que yo, entonces mis esperanzas se desvanecen cuando pronuncia un “hasta luego”, me regala otra brillante sonrisa, “espero verte de nuevo“ dice mientras suelta mi mano y finalmente se marcha justo en sentido contrario al mío.
Me quedo viéndolo irse, cuando voltea y me dice “adiós” con un gesto de la mano, hago lo mismo y sonriendo me doy la vuelta para seguir mi camino, después de todo ya voy tarde, aunque no creo que sea tan malo, es más, tengo la sospecha de que me sucederá más a menudo.

Sunday 11 December 2016

Después

Era un día como cualquiera, la misma rutina. Aquel día me había despertado con demasiada flojera. A pesar de que se me había hecho tarde yo hacía todo con calma, total si ya era tarde pues había que aprovecharlo.

    Al salir de mi hogar tomé el camión. Miraba por la ventana y veía a la gente muy apresurada, hasta que por simple coincidencia mi mirada se tornó a la mujer que iba subiendo: era una mujer bella, con unos ojos hermosos y una sonrisa que atraía todas las miradas. Fue fácil suponer que no se sentaría a mi lado, incluso ni voltearía a verme pero para mi sorpresa hizo ambas. De hecho cuando se sentó junto a mi me sonrió y yo le respondí con una sonrisa torpe.

     Los minutos pasaban y ella sacó una cosmetiquera de su pequeño bolso, del cual tomó un objeto muy curioso. Era un palo muy delgado con un líquido negro que se acercó con mucha delicadeza al ojo izquierdo. Lo primero que pensé al verla fue si no se lastimaba, pero creo que no sólo lo pensé porque comenzó a reír, e inmediatamente lo negó argumentando que ya tenía práctica. Con esas palabras comenzamos una gran charla sobre nuestras ocupaciones. ¿Quién iba a pensar que trabaja muy cerca de donde yo lo hago?

     Llegó la hora de que se bajara y lo hizo soltándome un cálido "te veo después". Por un momento creí que mi vida cambiaría pero jamás imaginé que aquellas palabras se desvanecerían tras un estruendoso golpe que cerraría sus ojos para siempre.


Brenda Ramos y Adriel Reyes

María Izquierdo a 61 años de tu muerte, México te agradece

María Izquierdo: a 61 años de tu muerte, México te agradece.
Por: Erandeny Osorio Rivero



María Izquierdo fue una artista y activista política que no ha tenido el lugar apropiado dentro del reconocimiento histórico, politico y artístico que le pertenece. Pongamos un primer eslabón a 61 años de su muerte, cumplidos el pasado 2 de diciembre, y conmemoremos a una mujer Jalisciense  que luchó por sus ideales, sueños y anhelos.

María Izquierdo tenía un alma efervescente. Fue una de las primeras mujeres en divorciarse, en ir a la escuela de artes y fue la primera mujer mexicana en exponer en el extranjero. Creó su propio grupo de intelectuales -el Pentágono-, y difundió sus ideas sobre la igualdad de los derechos de las mujeres a través de discursos, conferencias, programas de radio, revistas y periódicos, esto con la intención de despertar a las mexicanas y hacerles saber que el ser madres,  mujeres trabajadoras y estudiosas, no eran factores en conflicto.

El contexto en el que creció se vio reflejado en su actuar politico y en sus coloridas obras. Le tocó vivir en un México posrevolucionario que estaba reconstruyendo su clase politica e institucional, donde la lucha por la libertad se continuaba desde otras trincheras, dejando las armas y alzando la voz, acción que no sólo realizaron los hombres, sino que muchas mujeres también se organizaron para manifestar sus ideas, necesidades y sugerencias con fines a tener las mismas libertades y derechos que los hombres; claros ejemplos los tenemos en la lucha intelectual, politica y social que realizaron Hermila Galindo, María Arias Bernal, Carmen Alanís, y el primer Congreso Feminista en Yucatán en 1916.

Estas mujeres decidieron exaltar a su nación e influir en la vida política para cambiar la situación en la que se encontraban como miembros de una sociedad en transformación. Una de las mujeres que buscaron un espacio de expresión, fue María Izquierdo, pintora y actora política de las primeras décadas del siglo XX, mujer de arduo trabajo en el medio artístico y político de la nación, quien decidió construir ese camino de libertad y buscó expresarse desde el medio artistico, ayudando de esta manera a que la sociedad se identificara con su sentir nacional. Al mismo tiempo, debatió las posturas feministas que prevalecian hasta ese momento, pues consideraba que tener hijos, construir una familia, ser femenina y pelear por los derechos y libertades de las mujeres, eran aspectos que se podían realizar al mismo tiempo sin mayor conflicto.

Entre las principales batallas que libró María Izquierdo, se encuentra el pleito que tuvo con Diego Rivera, Orozco y Siqueiros, los muralistas más reconocidos durante este periodo y quienes le prohibieron realizar un mural porque consideraban que una mujer no tenía  las habilidades para un trabajo de esa magnitud; dicha batalla la llevo hasta la prensa, pero desafortunadamente la perdió.

Su carrera politica la llevó a conocer sudamerica, siendo la primer embajadora cultural mexicana, sin embargo no siempre fue una trabajadora pública del gobierno luchando por la educación y derechos de los niños y mujeres, sino que también estuvo dentro de la LEAR (Liga de Escritores y Artistas Revolucionarios) en la cual fungió como jefa de sección de Artes Plásticas y posteriormente, tomó la dirección del Bloque Femenil del Departamento de Bellas Artes, trinchera desde la cual, le exigía al gobierno mexicano más espacios de trabajo para los artistas.

No sólo su vida política es fundamental. Como pintora, su uso del color fue el tema recurrente en críticas, menciones y reconocimientos a lo largo de su trayectoria en vida como pintora, siendo la característica más aplaudida bajo la pluma de Antonin Artaud, Efraín Huerta y José Gorostiza; este debate y evocación respecto al color en su obra  llega hasta nuestra época, siendo lo primero que se considera al ser expuesta, aludida o referida.

María Izquierdo fue parte de ese gran grupo de artistas que ayudaron en la construcción del nacionalismo y fortalecimiento de la clase política, pero a su vez, Izquierdo fue mujer versátil y actora política, embajadora de cultura en Latinoamérica y excepcional feminista del siglo XX.

Dentro de los datos curiosos: si te preguntas si llegó a pintar con la mano izquierda, la respuesta es: sí. Izquierdo se enfrentó a una dura enfermedad llamada hemiplejia en los últimos años de su vida, la cual le impidió pintar con la mano derecha, sin embargo gracias al carácter e ímpetu que la caracterizaban, se atrevió a agarrar el pincel con la mano izquierda y continuó plasmando los colores de México.


Fue una gran figura Méxicana nacida en Jalisco, y esperemos que pronto su estado natal le realice la estatua que se merece en la Rotonda de los Jaliscienses ilustres y exalte los grandes trabajos y logros de esta mujer, a la cual hoy le dedicamos un minuto de silencio y conmemoramos agradeciéndole como mexicanos su legado artistico y politico.

Friday 9 December 2016

Antetítulo: Una solución que urge poner en práctica para poder llegar con bien a casa

Título: El alumbrado público, una herramienta contra la inseguridad y la delincuencia

Bullets:

  • ·         Las áreas más afectadas se encuentran al noroeste de la CDMX

  • ·         Un lugar sin luz es en espacio ideal para ser víctima de un crimen.


Ante los frecuentes acontecimientos sucedidos en materia de delincuencia en las últimas semanas en la Ciudad de México y en sus límites al noroeste con el Estado de México, resulta no sólo conveniente; sino necesario hacer una reflexión sobre el posible origen y las causas de estos problemas, que ya no sólo alarman a ese sector específico de la población que ha sido víctima de robos, secuestros, violaciones, o incluso asesinatos. El problema ahora yace en cada uno de nosotros al asumirnos como víctimas en potencia, tras estar expuestos a tantas noticias al respecto.

Este problema ya había sido identificado por el Jefe de Gobierno de la CDMX Miguel Ángel Mancera en el mes de junio del año 2014, y para intentar resolverlo presentó un programa de beneficio social llamado “Iluminemos tu Ciudad.” Este consistía en invertir 2.6 mil millones de pesos para la instalación de un sistema de alumbrado público moderno y eficiente al servicio de ciudadanía, pero, el proyecto no prosperó por el presunto caso de corrupción del Jefe de Obras y Servicios Alfredo Hernández García, quien renunció a su puesto el 12 de marzo del 2015 a petición del Jefe de Gobierno. El resultado fue que “las luces del programa se apagaron antes de tiempo” dijo Linaloe R. Flores, reportera de Sin Embargo

A más de dos años de haberse iniciado y posteriormente suspendido el proyecto “Iluminemos tu Ciudad” se puede señalar a la falta de alumbrado público como una de las causas de los recientes hechos delictivos de robo a mano armada, despojo de vehículos, violaciones, secuestros y homicidios en los límites de la zona noroeste de la CDMX que corresponden a las delegaciones Miguel Hidalgo, Azcapotzalco y Gustavo A. Madero, así como los límites del Estado de México que colindan con la capital, es decir, Naucalpan de Juárez y Tlalnepantla de Baz.

En la frontera entre el Estado de México y la capital se alcanza a reconocer un elevado índice de delitos. Ejemplo de estos es lo sucedido a Ana Daniela Andrade López de veinte años de edad que vive en el cruce de las colonias “Unidad Habitacional el Rosario”  y “Los Reyes Ixtacala” que pertenecen al Estado de México. Ella nos contó haber sido víctima de un asalto a mano armada el día 22 de septiembre del año en curso justo afuera de su casa, donde según comentó, carece del servicio de alumbrado público desde hace ya varios meses. Para evitar tragedias como la de Ana Daniela, es necesario volver a prender las luces de esta ciudad de manera inmediata. Es un asunto de urgente prioridad que se debe solucionar.


En el 2013, durante la presentación del libro ¿Qué es la seguridad Ciudadana?, Miguel Ángel Mancera mencionó: “estamos convencidos de que combatir los fenómenos delictivos es una condición necesaria para lograr mayor cohesión social y para que los habitantes disfruten de mejores condiciones de vida.” Quizá sea un buen momento para que nuestros representantes en el gobierno tomen las medidas necesarias para solucionar este problema y pongan en práctica dichas palabras, pues, como dice Horacio Castellanos Herrera “es claro que casi nadie está tan preocupado por el tema como los principales afectados: la propia ciudadanía.”

Josué Flores Remigio.
  • ·         Día de Muertos, una fusión de tradiciones

 La muerte viva de Guadalupe Posada
  • ·         “La Calavera Garbancera”, signo cultural mexicano.

La celebración del día de muertos llega con el inicio de noviembre, una fecha que ya forma parte de la lista del Patrimonio Cultural de la Humanidad. Es una fiesta en la que los vivos y los muertos se mezclan en un ambiente de humor y de diversión.
Se festeja a los muertos, se les recuerda, hay ofrendas, ceremonias y se visitan los panteones. El día de muertos, las costumbres y su significado tienen  una larga historia. Es una fusión entre la tradición europea impuesta en la Colonia con las celebraciones cristianas de Todos Santos y Fieles difuntos, y elementos de las ceremonias del México Antiguo, donde la vida y la muerte eran vistas como elementos de una dualidad.  El culto a la muerte practicado por las culturas prehispánicas  muestra la relación entre la muerte y los mexicanos que ha ido mutando, hasta ser representada de una manera más convencional.
Las calaveras y dibujos de cráneos como personajes en los grabados de José Guadalupe Posada están relacionados con estas fechas y representan además, distintas facetas de la sociedad, las vivencias del pueblo, la miseria y las clases altas. En fin, la cultura popular mexicana y la situación del país durante su época. La Catrina, "la muerte en vida", es la más representativa dentro de dichos grabados, y de alguna manera una consolidación del actual festejo del día de muertos que cobró fuerza durante el siglo XIX.
"La Catrina corresponde en su integridad a una autentica visión dual, legítima herencia de las más antiguas concepciones del núcleo de lo mexicano", apunta Ingrid Fugellie Gezan, artista visual egresada de la ENAP/UNAM.

La Calavera Garbancera, nombre original de la Catrina, apareció alrededor de 1912, vestida como una dama de clase burguesa. Era en realidad una crítica social  a los indígenas que trataban de adoptar identidades extranjeras que no les correspondían. Los garbanceros eran quienes rechazaban su raza, su herencia y su cultura. 
Hoy en día la Catrina es todo lo contrario, ha pasado a ser un símbolo representativo de nuestra sociedad que parece convivir entre la cotidianidad de los mexicanos. Lleva consigo lo insólito, lo absurdo, el humor y la risa que han inspirado en varios aspectos de nuestra cultura, desde las artes plásticas y la literatura hasta las modas actuales, como se puede ver en la gran cantidad de disfraces que se utilizan en la celebración del Día de Muertos. Pensar en la historia de La Catrina durante estas fechas nos ayuda a recordar la importancia de nuestras tradiciones y sus orígenes, además de lo que nos representa como mexicanos. 

Andrea Vázquez Saindon

Saturday 3 December 2016

Quedarse o vivir: últimos días de la Decena trágica

DANIEL MARES GARCÍA

-Hace 104 años, Francisco I. Madero y su familia tenían que salir urgentemente del país. No había opción pues si se quedaban, corrían el riesgo de ser asesinados

Sara Pérez de Madero hizo lo posible
por negociar con Victoriano Huerta
la seguridad de su esposo y su familia.
Después de haber sido traicionado, Francisco I. Madero fue hecho prisionero por órdenes de Victoriano Huerta, quien esperaba su renuncia a la presidencia la cual sólo firmaría si le garantizaban su salida segura del país.

      Conseguida esa seguridad, Madero firmó y su amigo Pedro Lascuráin asumió la presidencia, algo que duraría sólo algunos minutos porque enseguida presentó su renuncia y Huerta subió al poder. La esposa de Madero, Sara Pérez, tuvo un papel sumamente activo durante todos los días de la llamada Decena trágica: antes de la renuncia de su esposo, Huerta le aseguró que Madero estaría a salvo. Visitó además a distintos ministros plenipotenciarios para solicitar su apoyo pero solo algunos se lo brindaron.

“Que no quede ninguno con vida”

Mientras que Sara Pérez se reunía con su hija y la madre y hermanas de Francisco para irse todos juntos a Veracruz y tomar un barco que los llevaría a Cuba, Victoriano Huerta decidió cambiar de opinión. El ahora presidente ordenó a sus hombres que buscaran a todos los Madero del país y sentenció: “que no quede ninguno con vida ni con dinero”.

      La mañana del 22 de febrero todos los periódicos del país dieron la noticia: Madero y el vicepresidente José María Pino Suárez habían sido asesinados. El suceso ocurrió la madrugada de ese 22. Horas después, el padre del ya asesinado Madero supo lo ocurrido y rápidamente telegrafió a todos sus hijos para que salieran con urgencia del país. La familia más cercana se encontró en Veracruz y con ayuda del entonces ministro cubano Manuel Márquez Sterling lograron embarcarse rumbo a Cuba.

      El ministro Sterling escribió en sus memorias que antes de partir, la familia protagonizó “una triste escena de lágrimas”. Una sola noche bastó para terminar con la vida de un presidente y lograr que dejaran el país todos sus familiares. Cuando llegaron a Cuba, el pueblo y el gobierno recibieron a todos calurosamente. Debió ser bastante duro para ellos presenciar dicha bienvenida luego de huir de su país, donde hombres amenazaban con asesinarlos.

     Algunos años pasaron para que los Madero pudieran regresar a México sin correr algún riesgo y para que Sara Pérez diera entrevistas. En una de ellas, hecha en 1916, dijo que cuando se enteró que su esposo fue hecho prisionero, supo que dejar el país era necesario y que lo único que pedía era salir sin problemas. Hoy, con 104 años de distancia, sabemos que esa noche estuvo marcada por nada más que problemas. 

Friday 2 December 2016

Ciudad Colorido


Ciudad colorido

En ciudad colorido, hogar de los colores, existía armonía, paz y tranquilidad, hasta que los invadieron las peleas, desacuerdos y visiones de los humanos, donde los colores fueron marcados y señalados.


Azul que siempre jugaba en los lagos y ríos, ahora indicaba al hombre y rosa que disfrutaba decorar a las más bellas flores y mariposas ahora destinaba su luz a la mujer. Y verde y amarillo se peleaban por quien sería el neutro, cuando antes disfrutaban decorar juntos a los girasoles

Ante tal situación rosa decidió actuar y fue ante el juez color, al presentar su caso declaro que no querían pertenecer al mundo de la mujer, porque si podían decorar flores e insectos por igual, también podría hacerlo con hombres y mujeres, niñas y niños.

El problema es que azul sí estaba de acuerdo con la nueva situación y no pensaban apoyar a rosa. El juez color no sabía qué hacer, ya que él respondía ante el mundo de la gente del cual venimos tú y yo y con nosotros no es fácil dialogar, así que el juez ignoró a rosa.

Rosa, que era muy valiente, se unió con violetas, lilas y morados, afectados por pertenecer mas al mundo de la mujer que al del hombre. El juez Color no pudo ignorar más este evento e hizo el juicio público, se presentaron las demandas, los contrarios, los afectados y los que apoyaban la situación.

El juez color evaluó la situación y tomó una gran acción, al ver que azul se había vuelto grosero y mandón, vino a hablar con nosotras las personas y a pedir que los colores no decidieran o establecieran las formas de vestir, usar mochila, pintar nuestro cuarto, con base en ser niña o niño.


La lucha del juez color apenas iniciaba, ya que no todas las personas están dispuestas a escuchar. Pero el gran paso ya se había dado, rosa podía estar en el mundo del hombre y los niños y azul podía hacer felices a mujeres y niñas  por igual.


Recuerda siempre sonreír y piensa que en Ciudad colorido las diferencias entre azul, rosa, verde, amarillo es lo que pinta bonito tu mundo.











                  Ilustraciones de: Angeles Rivero