Tuesday 29 November 2016

La odisea de Godofredo

La odisea de Godofredo.

En este mundo redondo existen diversos comelones apasionados y de vocación, pero ninguno tan gordito como Godofredo el tragon; zampaba pozole, pambazos con un salchichon y al final siempre quedaba con ganas de devorar un jamon. Su gusto por la comida era voraz, cuando su estomago rugia como monstruo al detectar el dulce aroma de las garnachas o del pan al hornear.
   Sin embargo su felicidad se esfumaba, cuando al sus posaderas descansar, la leyenda del taco supremo su mente comenzaba a recordar; un taco celestial,  creado por Quetzalcoatl antes de zarpar, que traeria excitacion y felicidad para aquel individuo que probara su divinidad.
    La idea de este manjar provoco en Godofredo gran malestar, las hamburguesas se volvieron insipidas, la grasa como hiel y el pobre Godofredo lloraba a berrear, cuando las empanadas no podia ya tragar.
   ¿Redondo Godofredo, a donde iras a parar, sin tus tacos de suadero ni tu chiles en nogada para tu dia comenzar?
    Cenas de Navidad transcurrieron mientras nuestro comelom buscaba con desesperacion, hasta que delgado cual fideo, casi moribundo sus ojos cerro.
    Una voz escucho que lo llamaba con amor y su olfato detecto el olor a chicharron, se levanto con potestad y cuenta dio que podia volver andar,  siguio el hipnotizante hedor hasta un estrecho corredor que no podia cruzar por su milagrosamente recuperado figuron; de pronto el olor a chicharron desaparecio y detras de el la dulce voz lo llamo.
- Godofredo, muy orgullosos estamos de ti, acercate a nosotros para que puedas saborear lo que con tanto afan buscaste.
   Godofredo rodo hacia la voz y cruzando un inmenso pasillo, al pie de una escalinata, al fin encontro el taco supremo que con ahinco y desesperacion busco, con delicadeza lo probo y el sabor mas sublime en el encontro, lo saboreo y un extacis de felicidad en el surgio, no era como  otras comidas, mortales en su sabor, inferiores en su olor, deficientes en su estructura, termino el ultimo bocado con inmenso amor y al suelo se desplomo, victima de una pasion y felicidad inmensa y tranquilamente sus ojos comenzo a cerrar y en la obscuridad, comenzo a meditar su fantastica vivencia, pensando en si se encontraba en un sueño o si era la realidad, en si estaba vivo o muerto, y tras largas horas de tranquilidad, al final concluyo que lo que pensase no importaba en realidad, su felicidad era maxima, y con esto ¿que otra cosa en realidad ya podia importar?

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